En la actualidad muchas organizaciones han mudado su sistema de trabajo presencial al remoto, esto debido a la actual crisis sanitaria por Covid-19. Es por ello que cada vez más miembros de equipos se han animado a trabajar con las herramientas colaborativas que ofrece el entorno Cloud, pero, ¿seguirá esta modalidad después de regularizar las actividades? ¿o se trata de una solución transitoria?
Para conocer más de este tema conversamos con José Fernández, Chief Technology Officer de eSource Capital, sobre la actual Transformación Digital y el porvenir del entorno Cloud en las empresas:
Debido a la crisis actual muchas organizaciones han recurrido a las herramientas digitales para poder continuar sus funciones, en una especie de Transformación Digital no planificada. ¿En qué ha cambiado la perspectiva de los líderes de las empresas?
Las perspectivas son diferentes. Algunas empresas como Amazon, Microsoft, Google, etc. se han visto fortalecidas, mientras que algunas otras como líneas aéreas, industrias del sector hotelero, restaurantes, etc. solo han podido mantenerse reduciendo al mínimo sus operaciones.
En este sentido, los líderes de las empresas entienden la importancia del cambio enfocado en la supervivencia, cuya prioridad es establecer estrategias urgentes para seguir funcionando, tener la capacidad de mantenerse en el mercado y en algún momento potenciar su crecimiento. Esto representa un cambio profundo sobre la distribución de sus inversiones, pues inevitablemente se dará mayor importancia a aquellos servicios que los hagan más ágiles, y ayuden mitigar el impacto de situaciones disruptivas como la actual.
Muchos de estos líderes han mejorado su estrategia de renegociación, acercándose a sus proveedores con la finalidad de renegociar plazos y condiciones. La respuesta ha sido, en su mayoría, un convenio voluntario gracias a la gran disposición de muchos a replantear sus condiciones de negocios (según sea el caso). Al final este proceso de renegociación ha generado compromisos y lazos más fuertes, donde la relación cliente-proveedor se ha convertido en una relación de socios de negocios, con la conjunta intención de subsistir pese a la crisis, apoyados en la capacidad mutua de poder cumplir los nuevos términos y condiciones planteados.
Muchas organizaciones han visto que esta Transformación Digital no solo es una opción, sino que representa grandes ventajas (como lo es la reducción de costos). ¿Qué cambios crees que se puedan esperar al retorno a las oficinas?
Hay trabajos específicos que por su naturaleza necesitan formato presencial. Estos trabajadores no tendrán alternativa y deberán volver a sus oficinas cuando volvamos a una “nueva normalidad”. Inevitablemente, van a existir muchas nuevas regulaciones de distanciamiento social, lo que limitará costumbres establecidas en las oficinas como estrechar las manos, conversación de cafetería y pasillos, almuerzos de trabajo, etc.
Por otro lado existirán trabajadores que podrán operar remotamente. Una de las consecuencias de esta nueva realidad es que el talento, conocimiento y habilidades no estará en el escritorio de al lado, así que la adopción de herramientas que permitan la más óptima comunicación y trabajo colaborativo no son una opción..
Aunque la capacidad de trabajar remoto ha estado presente desde hace algunos años, la situación actual ha obligado a algunas organizaciones a adoptarlo sin ningún tipo de preparación. Quienes puedan trabajar de forma remota permanentemente tendrán varios retos, como adecuar debidamente los espacios de trabajo en las casas para poder ser 100% efectivos, ¿pero tienen todas las personas espacios extra para trabajar?. Otro reto son las interrupciones cotidianas como hijos, padres, mascotas, etc. por lo que muchos miembros de equipo deben administrar su tiempo de trabajo dentro del hogar para minimizar el impacto en su productividad. Y un tema muy importante trata de la seguridad de la información, al cual hay que dedicarle al estar remotos hay que tratarlo con mucha mayor atención.
Otro cambio importante está en la forma de medir a un trabajador remoto, pues las métricas no serán las mismas. Muchos trabajadores eran remunerados sencillamente por estar en la oficina y cumplir con su horario de trabajo, pero al trabajar remoto, esa no es la realidad. Esto implica varios cambios de cómo será la relación supervisor-supervisado, y aunque la tecnología nos facilitará este proceso en gran parte, la confianza en las personas y la evaluación por resultados se convertirán en mediciones básicas de esta nueva realidad.
¿Qué podemos esperar en cuanto Transformación Digital en el futuro cercano?
La tecnología nos ha ayudado en esta “nueva realidad”, pues sin ella hubiese sido imposible que miles de empresas pudieran seguir a flote, reduciendo sus capacidades de maniobra, pero manteniendo el funcionamiento necesario para subsistir.
Al vernos obligados a adoptar el trabajo remoto, han ocurrido cambios radicales en los procesos de negocios, donde la Transformación digital ha sido clave. No sólo se trata de tener la capacidad de hacer una videoconferencia y compartir información, eso es tan solo la punta del iceberg; donde la tecnología ha tenido mayor impacto ha sido en habilitar los sistemas Core de las empresas rápidamente para poder apoyar el ciclo de negocio que soportan la compra, producción, almacenamiento, distribución, facturación y cobro de sus productos y servicios. En la mayoría de los casos “La Nube” ha facilitado que estos sistemas Core estén disponibles y al alcance de los trabajadores remotos para poder seguir ejecutando su cuota-parte en el ciclo de negocios.
Bajo esta nueva realidad la pregunta no es si vamos o no a “La Nube”, como conjunto de elementos que facilitan y habilitan de forma rápida los cambios necesarios en los negocios; la pregunta es ahora ¿cómo nos vamos al entorno Cloud y cuál es la inversión asociada?, porque si algo resulta irrefutable es que la Transformación Digital ha llegado para quedarse.